Los escudos de nazarenos de nuestra casa están todos bordados (aunque debemos confesar que el refrán de "en casa del herrero, cuchara de palo" nos suele pasar)
No solo bordamos los nuestros, sino que también los hacemos para familiares y amigos, para que puedan lucir sus mejores galas el día de la Estación de Penitencia.
Aquí os mostramos los que bordamos para una nazarena de la Hermandad de San Benito. Creo que estos escudos son de los más complejos por la gran cantidad de detalles que llevan, pero el resultado es espectacular.
No dudes en contactar con el taller si quieres hacerle un regalo muy especial a alguien muy querido.